Caso #3: Nike

Buenas buenas!

Sinceramente estaba ansioso por hacer este post, porque lo vengo pensando hace ya varios días; con toda la información que manejamos en la actualidad, a veces es complicado llegar a una idea concreta, porque en la cabeza se mezclan las personalidades de las marcas con los targets a los que apuntan.

En el caso de Nike, me parece que el target y el brand character son bastante similares; pero, como este blog no tiene por objetivo analizar a qué público/s apuntan las marcas, espero que disfruten de mi punto de vista sobre la que me inspiró en esta oportunidad.

Antes de cerrar esta introducción, me gustaría aclarar que este tema puede generar visiones diferentes, ya que no todos interpretamos las cosas de la misma manera; desde hace varios años, una de mis frases preferidas es “hay tantas realidades como personas en el mundo”, y es algo de lo que estoy convencido. Mi intención no es lograr consenso sobre las personificaciones de las marcas, sino simplemente exponer mi lectura de la información que las mismas brindan y entretenerlos un rato. Y, de más está decir que, me encantaría que en sus comentarios vuelquen su visión y/o hagan sus aportes a la mía (gracias Gus por haber dado el puntapié inicial!!).

Ahora sí, vamos a lo importante…


Información sobre la marca (http://es.wikipedia.org/wiki/Nike):

Nike, Inc. (NYSE: NKE) es una empresa multinacional de ropa, calzado y otros artículos de deporte fundada en 1968 por Phil Knight y Bill Bowerman.

El isotipo, denominado "swoosh", fue creado por la estudiante de diseño Carolyn Davidson en 1971, por el cual recibió sólo 35 dólares de la época, inspirado en un ala de la diosa griega de la victoria, Niké, además de tener alas Victoria (en mitología romana) , era símbolo de buena suerte y se decía que tenia gran velocidad, que es lo que refleja Nike con sus productos de deportes. Carolyn se casará posteriormente con Phil Knight, quedando así con el conocido nombre Nike.


Publicidades:

http://www.youtube.com/results?search_query=publicidades+nike+argentina&aq=f\


Campañas gráficas:

http://www.google.com.ar/images?hl=es&source=imghp&q=gr%C3%A1ficas+nike&gbv=2&aq=o&aqi=g10&aql=&oq=&gs_rfai=


Mi visión sobre el Brand Character de Nike:

Nació para competir. Es más, el día que llegó al mundo, en la nursery miraba al resto de los bebes de reojo para ver quién era el más grande y analizaba a quién observaban más desde los vidrios que lo separaban del lugar en el que ansiaba estar.

Su infancia, lejos de erradicar esta tendencia, sólo fue un período en el cual reafirmó su necesidad de superar al resto y de, principalmente, superarse a sí mismo. A la temprana edad de 9 años, ya se notaba que tener amigos para él era algo anecdótico porque percibía a toda persona como un potencial rival; por esto, sus compañeros le tenían temor, al mismo tiempo que lo admiraban. Terminó la escuela primaria siendo abanderado, líder del grupo y, por supuesto, el mejor deportista.

En su adolescencia, aquello que perfilaba ser en sus primeros años, se cumplió con creces. Desde la mañana y hasta media tarde asistía a un colegio bilingüe. Después de clases, todos los días practicaba deportes y en todos ellos se imponía ser el mejor: en tenis era un jugador preciso, que funcionaba como un reloj y que trataba a los demás con sumo respeto; también tenía una fortaleza inigualable, nunca daba un tanto por perdido y mucho menos un partido. En golf era muy talentoso, distinto al resto y con una categoría nunca antes vista para alguien de su edad. En fútbol, marcaba la diferencia; era rápido y muy hábil con sus pies, llevando a los partidos de todas las semanas un nuevo “lujo” para el deleite de sus compañeros y del público.

Los fines de semana, cuando no descansaba para prepararse para algún evento deportivo importante, su desafío era ser el que volviera a casa con más teléfonos de conquistas en la agenda.

Este fue un período muy rico para él, en el que absorbió conocimientos sobre muchas materias. Sin embargo, nunca aprendió a perder. Si no ocupaba el primer lugar del podio, decía que era porque algo había pasado: o el árbitro lo había perjudicado, o el resto de los jugadores del equipo no había dejado todo en la cancha, o había sentido una molestia en algún músculo o, simplemente, se había desconcentrado porque el rival no estaba a su altura.

Una vez terminada la secundaria, su vida se encontró en una encrucijada: ser un deportista de elite o ir a la universidad. Pero siempre tomó decisiones rápido; el período que necesitaba para pensar una estrategia que lo llevara aceleradamente por el camino más efectivo y lo catapultara hacia el podio, era mucho más breve que el que requería el resto (que preferían pensar paralelamente en tres alternativas, para luego elegir). La opción que tomó fue la que le permitió abarcar más actividades. Si elegía ser un deportista reconocido, se tenía que limitar a una sola disciplina y esto, claramente, no era para él.

Hecha esta elección, siguió respondiendo a su principio rector, que era ser el primero en todos los órdenes de la vida. Es por esto que fue el primero de su grupo en recibirse (de ingeniero en sistemas, con honores), el primero en hacer un MBA en el exterior, el primero en casarse y el primero en tener hijos.

Aunque varias veces analizó la alternativa de tener su propio emprendimiento, prefirió hacer su carrera profesional una compañía multinacional de la industria de la informática, por el dinamismo y la constante reinvención que caracterizan a dicha industria, y porque sentía que necesitaba ser parte de algo que estuviera en cada rincón del mundo.

Hoy, a sus 42 años, con cuatro hijos y todavía casado, es un hombre extrovertido, que dice saber de todo, que permanentemente trata de arreglarse solo, que todo el año tiene la piel bronceada porque disfruta mucho viajar y que va continuamente vestido a la moda. Siendo el CEO de la empresa en la que trabajó toda la vida y el mejor de los deportistas del country en el que reside, muchas veces piensa en que es momento de “parar la pelota” y bajar un poco el ritmo; pero su mente le sigue proponiendo nuevos desafíos y, cada vez que esto pasa, algo en su interior lo persigue y le grita repetidas veces “JUST DO IT” y él, que se cataloga como “un tipo muy exigente”, no lo puede evitar.



Y hoy las dos frases de Albert Einstein:

- "Dar el ejemplo no es la principal manera de influir sobre los demás; es la única manera".
- "Hay dos formas de ver la vida: una es creer que no existen milagros, la otra es creer que todo es un milagro".


Arrivederci!